Voy hablar, no me puedo quedar en silencio, para no otorgar. Hablaré.



Esteban Marrero Batista

 Por Esteban Marrero. Son importantes las causas que impidieron que el compañero Papote retenga el poder en las pasadas elecciones, y para nadie es un secreto menos para él, que casi toda la responsabilidad de la derrota  caen sobre sus hombros, aunque hoy quiera tapar el sol con un dedo,  acusando de "traición" a compañeras y compañeros que siempre le han sido fiel, ¡ah, pero como él es un "sabelo todo" perdió  primero la perspectiva y luego de un hombre sin condiciones, y con un partido con más de un 50% como es  el PLD. Eso no quiere decir que no hubo traiciónes y pactos, claro que sí, pero fueron a la clara, a la vista de todos, eso significa que no puede haber confusión.

En la semana pasada convocó a los dirigentes de su "equipo"  a una reunión,  pero no con el propósito de hacer un replanteamiento en su forma de actuar, miren compañeras y compañeros, una reunión para repetir los mismos disparates, ¿ y ustedes saben cual fue uno de los  personajes  mandado  hacer la convocatoria? al burgar  ladrón y delincuente probado, conocido como JIMY, no sé su apellido, sospecho que debe ser  "LADRON", tengo suficientes   argumentos para tal acusación, y lo desafío a que me someta a la justicia a él y a quien sea.

Ese personaje, ladrón, ladrón, ‼pero ladrón, ¿ustedes saben lo que es ladrón‼, no tengo más nada que decirles, apareció de la noche a la mañana y de inmediato Papote lo nombró como encargado de su   seguridad y luego lo impuso como director de seguridad de la campaña, previo a todo eso,  JIMY era cambiador de cheques en el ayuntamiento y al mismo tiempo prestamista (usurero), se le permitió que traslade su negocio  ilegal al ayuntamiento, y si por ejemplo se tenía que ganer 30 pesos por cada cheque cambiado, se cobraba 50, alegando que no tenía menudo, nunca tenía menudo, los cheques cambiados eran cientos. Los prestamos eran dado a los empleados con la modalidad de la tarjeta de débito que tenían los empleados de nómina, de manera que se apoderó de las tarjetas de muchos empleados los cuales duraron hasta que terminó la gestión de Papote sin ver las tarjetas, JIMY le sacaba el dinero del cajero y les devolvía en medio de un misterio, dos  trescientos pesos que les quedaban al mes, a cada empleados envuelto en el gancho estafador. Dos empleados que se vieron imposibilitados de pagarle luego de un largo tiempo sin ver sus tarjetas ni dinero, fueron agredidos físicamente, a uno de ellos le rompió un brazo de un palo, y eso ocurrió en el mismo ayuntamiento, pero nadie le llamó la atención, siguiendo JIMY repitiendo amenazas de agresión en contra de empleados del cabildo.

Preocupados por la situación dirigentes de los intermedios del kilómetro 24 se apersonaron a la oficina del síndico para contarle lo que estaba ocurriendo; pero no  tomó ninguna medida, al contrario, en el mes de abril el prestamista se quedó con todo el dinero de muchos de los empleados que cayeron en el gancho de tomar un préstamo a cambio de su tarjeta de débito. (el rico se enseñorea de los pobres, y el que toma prestado es siervo del que presta: proverbio 22:7).  Se rumoró entonces que el negocio no era de JIMY solo, y entonces Papote sigue  "confundido" en las causas de su derrota. Continuará....  "El Terso Digital".