La Habana, 13 feb (PL) El escritor e investigador Luis Britto afirmó hoy aquí que por el delito de querer vivir a plenitud, las grandes potencias condenan a Venezuela y dictaron su sentencia de muerte hace unos 16 años.
- Estados Unidos tiene en la mira un grupo de países que debe ser atacados pues poseen reservas estrategias de energía: Iraq, Libia, Siria y Venezuela, explicó en una conferencia en la Feria Internacional del Libro en Cuba.
Después, el presidente Barack Obama catalogó a Venezuela como una amenaza inusual y extraordinaria contra la seguridad de su nación. Todos aquel a quien Estados Unidos confirió ese "honor" ha sido agredido y sus riquezas saqueadas, observó el prestigioso intelectual.
Ahora estamos en una especie de fila escuchando la marcha fúnebre, mientras se somete a todo un territorio a un ritmo macabro, denunció.
"Venezuela sufre una agresión cultural sin precedentes. Antes, algunos solo oían hablar de esta nación por sus Miss Universo, pero por estas fechas los grandes medios le dedican importantes espacios."
"Todo comenzó cuando empezamos a producir rebajas espectaculares en el nivel de pobreza, vencimos el analfabetismo y hoy, una uno de cada tres venezolanos estudia, y uno de cada nueve posee educación superior. Además, creció la expectativa de vida de la población."
Venezuela es el país capitalista con menor desigualdad social, pero esos son delito que se "pagan" y que las grandes potencias no pueden perdonar, aseguró Britto.
Para lograr la aniquilación física de un pueblo, primero deben hacerlo culturalmente -dijo- esa es la táctica de los grandes monopolios de la información que generan diluvios de noticias nefastas sobre Venezuela.
También acusan al actual Gobierno de Caracas de violar los derechos humanos y de falta de democracia, aun cuando vencieron numerosas elecciones y supieron reconocer y aceptar su derrota en los comicios parlamentarios, apuntó.
Sin embargo, agregó, miran hacia otro lado frente a la infiltración de paramilitares en territorio venezolano y ante los asesinatos -por parte de esos mismos elementos- de jóvenes como Robert Serra, militante socialista.
Según Britto, durante los últimos años Venezuela fue "corazón de grandes planes de integración" como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, la Unión de Naciones del Surâ�� y ahora más que nunca necesita el apoyo de esos organismos internacionales.
A juicio del historiador y analista político Vladimir Acosta, la conspiración mediática contra Venezuela persigue presentarla como un Estado fallido, que no se ocupa de las necesidades de su pueblo
Desde hace años, los ataques se centran -fundamentalmente- en la economía, acotó.
"Al elevar la calidad de vida y el nivel adquisitivo de los venezolanos, la demanda creció por encima de la producción y el país depende de muchos productos importados."
De hecho, Venezuela depende del petróleo, y el precio del crudo es controlado por un mercado internacional, dañado por la crisis económica mundial, recordó.
"Pero mientras el Gobierno facilita a las empresas privados un dólar barato para estimular la importación de mercancías de primera necesidad; después estas la venden a precios estratosféricos y así buscan generar un descontento generalizado".
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Moderados, no dañar las buenas costumbres de las familias,pero con toda la libertad.